De batallas, dragones y princesas...

En la vida irás luchando,
a veces por un lugar en el mundo,
otras más por amores;
pero la más importante hermano,
por encontrar tu felicidad.

Asi que desenvaina tu espada
cual guerrero medieval,
por corsel tus sueños,
por armadura el corazón.

Vence aquel dragón
que te hunde en la tristeza,
rescata a esa hermosa princesa
que es la felicidad.

Vuela siempre tras tus ideales
no te canses de soñar;
y si un día caes de muy alto
abajo estaremos nosotros,
para ayudarte a levantar.

Y si la vida te reta hermano
mirale a la cara y sin miedo,
lucha con tu espada en mano
y demuestra tu espiritu guerrero...

A mi hermano Miguel, el mejor compañero de batallas que un caballero puede tener.

¿Querer o callar?

"Ya no me importa ser un ser sin alma, atrápame"

Ya por fin todo es silencio, sólo estamos tu, una habitación oscura y yo... Comienzas el ataque ¿por qué te empeñas a traerla a mi mente?, antes por lo menos yo estaba de acuerdo, hoy así sin más me acorralas y me haces pensar en ella... ¿se acordará de mi?, ¿repetirá mi nombre tantas veces como pueda antes de dormir?, ¿seré su primer pensamiento al despertar?... Tantas y tantas preguntas me surgen al pensarla que ya creo que mi razón está hecha con pedacitos de ella. Hoy por ejemplo, caminaba bajo la lluvia y creía verla en el rostro de toda mujer que se atravesaba en mi camino, podría jurar que era su voz la que podía escuchar entre toda la multitud y que esas dos estrellas ausentes en el cielo, las pude ver en su rostro la última vez que nos vimos...

Recordando todas las cosas que me hacen pensarla podría estar aquí no sólo esta noche, pues ni siquiera en 100 noches podría terminar de numerar todo lo que hace que tú la vuelvas a poner en mi pensamiento; el vuelo de una pluma en el aire, el silbido del viento, el canto de un ave...

Ahora recuerdo mi pasado, solía ser casi perfecto; bueno, por lo menos solía ser feliz en mi ignorancia al no saber de ella, ahora lo único que me acerca a la perfección y me trae felicidad es cuando invade mi razón y comienzo a soñar despierto.

¿Será bueno o malo pensar tanto en ella?, hay días que la llego a extrañar tantas veces como respiro… te confieso que tengo miedo, pues en cada suspiro siento como un trozo de mi alma escapa para encontrar refugio en en su ser, y si sigo a este ritmo, lo más probable es que pronto mi alma resida dentro de ella.

Y es aquí donde me encuentro otra vez, el lugar donde el camino se divide en dos, ¿querer o callar?… Es aquí donde más necesito tu valor, mi pequeño corazón...